Demasiadas cosas a la vez.

Me niego a poner nombres

a los sentimientos,

no quiero poner precio

y fecha de caducidad,

ni sabores a los besos,

ni color a los momentos negros,

es mejor dejarlos pasar.

Tengo el pulso acelerado

y el aire me sabe raro.

Si me falta tu sudor,

si no estás entre mis brazos

rompo el cielo en mil pedazos

y te regalo una porción.

Pero no entiendo cuando

de repente no me quieres
y pienso qué cojones

habré hecho mal.
Y entre quedarme en casa

a llorar o ser valiente
elegí (¡olé mis huevos!)

la opción de no llorar.

Me da la impresión de que a veces

se me va mucho la olla
y no me entero de lo que hay alrededor.
Tengo una colección

con cientos de ilusiones rotas
tiradas por el suelo de mi habitación.

Tengo el pulso acelerado

y el aire me sabe raro.

Si me falta tu sudor,

si no estás entre mis brazos

rompo el cielo en mil pedazos

y te regalo una porción.